La carta de la sacerdotiza nos enseña que todo tiene un proceso íntimo: en la pareja, personalmente, al preparar un proyecto, un mueble, todo tiene que gestarse, antes de eclosionar, antes de brotar (al superar este proceso llega la carta 3, la emperatriz), y este proceso tiene un final no solo un fin.
Su finalidad: permitir que todo salga a la luz, en su momento devido, aunque para ello hay que encontrar o hacer una grita en la realidad dada
Ya han pasado 10 años desde la primera vez que me acerqué al Tarot, los primeros años fueron un tanto lentos, poco a poco sentí el conocimiento que arrojaban las cartas, y la forma en que la realidad se conforma en un orden perfecto así como tangiblemente interpretable PALABRAS QUE PROCURAN DESIFRAR UN UNIVERSO DE SIGNIFICADOS
Los secretos...
¿quien está más alejado del conocimiento que aquel que resguarda el acceso a las puertas del mar de sabiduría?